fbpx


Maquillajes coloridos, atuendos con brillos, pelucas gigantes y creatividad son los principales componentes de la cultura drag, que durante los últimos años se ha expandido hasta el país. Si bien no existe una definición única sobre lo que significa ser drag, sus representantes sí señalan que se trata de una forma de liberación para la comunidad LGBTQ+, o para cualquier persona que desee atreverse. 

‘‘El drag es un arte multidisciplinario donde puedes desarrollarte en diferentes áreas, el maquillaje, la moda, el humor, la música, la performance, la necesidad de comunicar’’, dice David Montoya, también conocide como Danae Paz en la escena nacional. 

Tampoco es claro el origen concreto de la cultura drag, ya que existen teorías de que este tipo de arte comenzó a desarrollarse durante el siglo XIX en Reino Unido. ‘‘El transformismo existe en el teatro y el mundo desde antes que se conociera a la comunidad LGBTQ+ como tal’’, señala Danae Paz en conversación con El Mostrador Braga

Lo que sí es conocido es que su popularidad tomó fuerza en New York, entre los años 60 y 90. Durante ese mismo tiempo, quienes participaban de esta cultura se veían expuestas a la discriminación y violencia hacia la comunidad LGBTQ+. Por lo que el drag era su forma de visibilizar su identidad. 

Un ejemplo ilustrativo es el documental The Queen (1968), que cuenta la historia de la drag queen Flawless Sabrina, quien fue arrestada múltiples veces por vestirse como mujer. La pieza audiovisual también aborda la historia de otras drags y sus vivencias respecto a sexualidad, discriminación, entre otros temas. 

the queen

Créditos: IMDb.

Los inicios 

‘‘Mi gusto por el drag nace a los 14 años. Un día me resfrié y me quedé en casa con mucho tiempo libre y un internet con ganas de ser explorado. Me encontré con un millón de videos de ‘Amigas y Rivales’ de Fausto, una de las primeras discotecas LGBT del país’’, cuenta Paz. 

“Amigas y Rivales” es un reality web chileno, con alta popularidad en internet debido a la participación de destacadas artistas del mundo drag nacional, como Connie Dacardill, La Pola, Katiuska Molotov, Botota Fox, entre otras.

Este programa fue el que motivó a Danae a continuar interesándose más y más por este tipo de performance. Bastó un solo año para atreverse y realizar sus primeras presentaciones frente a un público. ‘‘Hice drag por primera vez a los 15 años, en unas alianzas del colegio, interpretando a Lady Gaga en la coreografía y a Christina Aguilera para el concurso de imitación, por mi claro parecido con la artista’’, señala entre risas. 

La presentación fue llevada a cabo en un colegio religioso, sin embargo, para Danae no fue problema personalizar a aquellas divas del pop. De hecho, desde sus compañeros y establecimiento no hubo ningún tipo de crítica. Sin embargo, a pesar de esto, sí decidió no contarle a su familia, ya que eran un poco más conservadores. 

Así, fueron años en los que los lazos de sangre de David no se enteraron de la existencia de Danae. ‘‘Fue hasta los 20 –que supieron– y a los 22 se los planteé como algo a lo que me quería dedicar. Ya estaba grande, así que no había mucho que aceptar o no’’, relata. 

La situación que narra, sobre ocultar el drag a la familia, suele ser muy común dentro de esta comunidad. Principalmente, por la exclusión y discriminación que viven estas personas. De hecho, ante esta situación es que surgen las houses o casas.

Una casa se conforma de un grupo de personas que comparten un apellido drag y compiten o realizan presentaciones en conjunto. Pero, también se desarrolla una relación de afectividad y apoyo. Por ejemplo, en Estados Unidos una de las casas más populares es The House of LaBeija (@officialhouseoflabeija), fundada alrededor de los años 70 y que hasta la actualidad está vigente. 

Crystal LaBeija (izquierda). Créditos: Extraída desde The Queen.

‘‘En la comunidad LGBTIQ+ es muy usual ser excluidos de sus familias, muchos(as) no tienen apoyo, comprensión y contención. Por esto muchas personas llegan a un lugar que se puede llamar la familia que sí escoges’’, dice Danae Paz. 

Parte de House of LaBeija en la actualidad. Créditos: @officialhouseoflabeija.

Actualmente, para la artista, el drag representa una forma de expresión de total libertad y libre de prejuicios, especialmente para la comunidad LGBTQ+. ‘‘Es un espacio seguro para poder desarrollar nuestra femineidad reprimida, algo con lo que muchos(as) podemos sentirnos identificados y conectar’’.

La expansión en Chile 

Uno de los shows de drags más conocidos a nivel mundial es Rupaul’s Drag Race, programa televisivo de Estados Unidos que nació el 2009 y que hasta la fecha se encuentra en emisión. Quien está a cargo de este espacio es la drag queen destacada internacionalmente y activista LGBTQ+, Rupaul Charles. 

Desde este show televisivo, han surgido otros nombres de drags que dan la vuelta al mundo. De hecho, hace algunas semanas a nuestro país llegó el evento All Winners, que juntó a destacadas exponentes del programa con artistas nacionales en el Teatro Caupolicán, entre ellas, Danae.  

El evento fue catalogado como histórico, no solamente por el nivel del espectáculo presentado por las exponentes nacionales e internacionales, sino porque la convocatoria repletó el Teatro Caupolicán. 

‘‘Participar del evento drag más grande del país, con más de 4 mil personas en el público, fue como estar soñando despierto. Me sentí como Katy Perry en su Teenage Dream era. Creo que ese evento da pie a que el drag chileno llene muchos teatros más, y quién sabe tal vez un Movistar, un Estadio Nacional. O, incluso, qué hermoso sería una apertura de la Teletón con drags’’, dice Danae.

A pesar de esta masiva apertura hacia la cultura drag, la artista sí subraya que lamentablemente esto no es algo del todo normalizado, ya que la discriminación es algo aún palpable hacia la comunidad LGBTQ+. 

‘‘Chile aún es muy conservador, cuando salgo a la calle en drag todavía recibo comentarios desubicados y de mal gusto. Incluso, el año pasado tuve problemas en un programa de televisión al que me invitaron por ir vestido “de mujer”. Entonces ha avanzado, pero no significa que no exista mucho camino más por recorrer y que otorgue mayor visibilización y roles de relevancia, porque el drag no es solamente colores, fantasía y entretención’’, indica. 

Por último, la artista cree que la apertura hacia esta comunidad seguirá expandiéndose, esto de la mano de más personas que se atreven a formar parte de la cultura drag, así como de quienes la consumen. 

‘‘Creo que cada día se valora más dentro del país, el nivel de nuestro drag también cada vez es más elevado, por lo que el sentido del drag como arte recibe mejor apreciación. Pero me encantaría que existiera más visibilización’’, expresa la performer

‘‘Faltan drags en televisión, faltan drags en podcast, faltan drags en la moda, faltan mentes drags en la política’’, finaliza Danae Paz. 

Síguenos en

El Mostrador Google News





Source link